En la era digital contamos con numerosa información a nuestra disposición y si bien, las redes sociales son herramientas prácticas que nos pueden aportar beneficios, informaciones y momentos de distracción, sin darnos cuenta también podemos sufrir de «infoxicación digital».

Esto se debe a que, constantemente recibimos una sobrecarga de información que en general no llegamos a leer ni a procesar y como resultado acumulamos y guardamos compulsivamente, textos, videos, podcasts, imágenes o gráficos, con la intensión de verlos después.

Este «comportamiento» que en apariencia es inofensivo, se convierte en un hábito, que una vez instalado puede llegar a generar efectos negativos en la salud física y mental, sin que las personas que lo padecen se den cuenta de sus consecuencias.

Fue creado en 1999 y en ese momento, hacía referencia a un mal que en general afectaba a los jefes de redacción, periodistas o editores, ya que en su trabajo diario estaban sobreexpuestos a una gran cantidad de información. Hoy en día, con el avance de las tecnologías en materia de celulares, esta “invasión” de información constante afecta ya, a personas jóvenes.

¿Sabias que la sobreinformación puede ser uno de los mayores obstáculos para poder alcanzar tus metas?

Esto sucede, ya que al tener que analizar y comprender, tantas técnicas, consejos, estrategias o fórmulas, podemos sentirnos saturados y entramos en un estado de frustración, sin poder pasar a la acción. Al no poder elegir lo que realmente es significativo para nosotros, como resultado, nos alejamos de los cambios que tanto anhelamos.

Entonces, sin darnos cuenta, quedamos atrapados en lo que se conoce como la “Parálisis por Análisis”, es decir, analizamos los diferentes escenarios, pensamos las diferentes propuestas y buscamos formas de aplicar las nuevas herramientas, pero al final, solo queda en el plano mental sin poderlas ejecutarlas y llevarlas a la práctica.

Por lo tanto, saber identificar los efectos negativos de este «fenomeno», te ayudará a gestionar la información en base a tus necesidades, cuidando tu salud mental.

En el próximo artículo, vamos a analizar las señales, para que puedas sacar tus propias conclusiones.

GS.Vågn Nu

«La recompensa de una buena acción es haberla hecho».

Séneca